RESTRICCIÓN DE SERVICIOS Y DISMINUCIÓN DE PERSONAL EN LAS E.S.E.s

RUEDA DE PRENSA

Diciembre 04 de 2015

Ya es sabido por los medios de comunicación y la comunidad en general, que la falta de flujo de recursos en el sector salud no es nuevo y desde hace varios años las Empresas Sociales del Estado E.S.E. han advertido del problema, al ver que con el paso del tiempo se agudiza la crisis y una solución es cada vez más lejana.

Hoy son pocas las clínicas y hospitales que no viven este problema y los afectados no han sido solo los pacientes que no pueden acceder a servicios de mejor calidad y viven inconvenientes con cancelación de citas y demoras en exámenes, diagnósticos e intervenciones quirúrgicas; en esta crisis también se están viendo afectados los empleados y colaboradores del sector que no reciben los salarios correspondientes y a tiempo, y en el peor de los casos terminan siendo una cifra más al prescindir de sus servicios.

Ejemplo de esa restricción en los servicios y disminución de personal es lo que se ha visto en varias de las E.S.E. del departamento, pues por iliquidez el Hospital San Pedro y San Pablo de La Virginia tuvo que cerrar el segundo nivel de atención (quedándose sin servicios de cirugía y consulta especializada) y la E.S.E. Salud Pereira está presentando disminución en el servicio de consulta externa en el área rural.

Otros casos críticos a resaltar en Risaralda, es que tanto el Hospital Santa Mónica de Dosquebradas como el Hospital San Vicente de Paúl del municipio de Santa Rosa de Cabal, han tenido que prescindir de personal por no tener cómo pagar los salarios, y el Hospital Universitario San Jorge ha apalancado su funcionamiento y operación en los proveedores.

Por otro lado es importante resaltar que el problema del sector es estructural y a pesar de la buena gestión gerencial es imposible mostrar buenos resultados cuando los recursos no llegan al prestador; es así como a esta crisis de la salud no se le ha prestado la atención necesaria y solo se ha visto de parte del Gobierno Nacional “pañitos de agua tibia” que lo único que hacen es prolongar el coma en el que está el sector.