OBESIDAD Y SOBREPESOS CONTINÚAN EN AUMENTO EN ESTA REGIÓN
El 24 de septiembre es el Día Nacional de la Lucha contra la Obesidad y el Sobrepeso, y por eso desde de las diferentes entidades de salud se buscan sensibilizar por la necesidad de crear hábitos de alimentación sana y adecuadas, que permitan tener un peso adecuado.
Desde el congreso de la República se sancionó la Ley 1355 de 2009 en donde se establece el 24 de septiembre como el Día Nacional de la lucha contra la Obesidad y el Sobrepeso; así como la Semana del Bienestar, con el fin de hacerle frente a esta que se define como una enfermedad crónica de alta prevalencia, más aún cuando se reporta el aumento de la obesidad en las diferentes regiones del país, generadas por una mala alimentación e inactividad física.
Hábitos normales y cotidianos de nuestras vidas, relacionados con una alimentación que no es sana, además del sedentarismo, alimentos industrializados, la poca o nula actividad física, el aumento de costumbres relacionadas con el consumo de comidas rápidas, han facilitado que se aumente la obesidad y el sobrepeso en nuestros país y Risaralda no es ajena a esta situación.
Según el Ministerio de Salud, se deben intensificar las campañas de sensibilización sobre la importancia de mantener el peso corporal en niveles adecuados, prevenir el sobrepeso orientando a la comunidad sobre la alimentación saludable e incentivar la actividad física
Desde los hospitales agremiados en la Asociación de Hospitales de Risaralda, se vienen realizando recomendaciones importantes para generar estilos de vida saludables, los cuales, impactan de manera positiva en la obesidad y en patologías como la hipertensión y la diabetes; entre otras enfermedades que se generan por el incremento de peso.
Dentro de las recomendaciones es importante tener en cuenta la actividad física regular, no sólo de fines de semana y una dieta balanceada, con una buena porción de verduras y baja cantidad de carbohidratos y reducir el consumo de azúcar en forma importante.
Es importante resaltar la necesidad de incluir dentro de la dieta el consumo de grasas “buenas” que se encuentran en las carnes magras, pescados, frutas, verduras, legumbres y frutos secos.